La devoción en las relaciones de pareja puede tener una cara B. Entonces al romance sí hay que ponerle condiciones. Ambas reflejan una falta evidente de confianza. Estos y otros comportamientos despiertan en quien los padece un sentimiento que define de forma clara las relaciones tóxicas: el sufrimiento. Cuando mantener una relación de pareja deriva en sufrimientoes momento de dejarlo. Dicen que los polos opuestos se atraen, pero las relaciones entre caracteres antagónicos tienen una alta probabilidad de ser incompatibles con la felicidad. Asimismo, un alto grado de empatía puede fomentar la toxicidad. El entendimiento hacia la otra parte es positivo, pero hasta un punto. Al principio solo vemos lo bueno del otro; el tiempo nos ayuda a descubrir lo que no nos gusta y a aprender a gestionarlo o no.
Muchas administraciones han aprovechado este año el Día contra la Violencia de Género para resaltar un tipo de acidez que sigue escondido entre cuatro paredes, pese a los gritos y discusiones en las que viaja. Se prostitución de la violencia psicológico que sufren muchísimas mujeres en el silencio de los desprecios y humillaciones. Producen muchas secuelas como ansiedad, temor, dolores Una de las mayores dificultades que tiene la lucha contra este tipo de violencia es la la permisividad con la que se vive por parte de los otros. Las mujeres no la identifican como tal, los prole no la denuncian, las vecinas no alertan y los profesionales, como médicos o trabajadores sociales, no siempre son capaces de detectarla. Martínez asegura que el problema en estos casos es casi siempre la prueba judicial. Le controlaba el dinero, el móvil, la agenda y hasta las conversaciones telefónicas.